-Brutal Truth “End Times” (2011)
El titulo de este quinto disco de la banda de Dan Lilker (segundo desde la vuelta con aquella bola de concreto certera e inteligente llamada “Evolution Through Revolution”) pareciera ser profético o, simplemente, llevar un poco la corriente con el clima de superstición en medio del caos global.
Y, a fin de cuentas, la música de Brutal Truth pareciera la mejor banda de sonido en medio de uno de los años más movidos a nivel político y, por qué no, musicalmente hablando.
Claro, como sabemos, Brutal Truth desde aquel “Need To Control” (1994) demostró romper las nociones tradicionales del Grindcore hasta aquel momento y gracias a ello salieron grupos tan salvajes como con un gran apetito creativo como Nasum, Cephalic Carnage, Pig Destroyer o Soilent Green, por lo que aquí nuevamente no nos encontraremos con un simple acto de catarsis.
Están los riffs entre disonantes, enroscados e híperviolentos (y, por qué no, dementes) a cargo de Erik Burke, las inclinaciones al Sludge (el comienzo con “Malice” lo dice todo), los reconocibles gruñidos de Kevin Sharp, expulsando la cruda y ponzoñosa realidad desde su garganta, la moladora humana llamada Richard Hoak, dándole sin piedad a su batería como si no hubiera mañana. Algunos momentos de interesante experimentación (el final del tema título), el bajo asesino de Dan Lilker, el eterno y siempre disfrutable tributo a “You Suffer” (“Trash”), el irreemplazable groove contagioso que nos atrae al mosh más descontrolado y ese extraño final cuasi ambiental llamado “Control Room”.
Mientras esperamos que Napalm Death nos entregue otra excepcional placa y las nuevas hordas de jóvenes sedientos de violencia sigan sacando discos con el mismo apetito de los padres (como también, por qué no, con el espíritu experimental de estos), aquí tenemos otro gran disco de una banda pilar del querido y trasgresor Grindcore de siempre. Y eso siempre es de celebrar.
Review escrita por Mariano Lastiri.
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