Por Fernando Suarez.
-Psudoku “Space Grind” (2011)
Psudoku es una entidad ideada por Papirmøllen (único integrante de los grinders noruegos Parlamentarisk Sodomi) que, ya desde su nombre y el título de esta placa debut, marca sus claras intenciones expansivas dentro del Grindcore. Lo que aquí tenemos son dieciocho temas en poco menos de media hora, que describen un recorrido frenético por regiones estelares inexploradas y estallan como coloridas supernovas creando, a su vez, un universo musical tan único como revelador. Ok, no son los primeros en acercar el vértigo violento del Grindcore a las intrincadas nociones rítmicas y armónicas del Jazz y las más lisérgicas visiones de la Psicodelia en general pero, sin duda alguna, lo expuesto en este fervoroso “Space Grind” presenta una fuerte personalidad y un grado de inventiva superlativo. Algunos lo han definido como una cruza entre Discordance Axis, Mahavishnu Orchestra y Origin pero, si bien dicha descripción sirve como para hacerse una idea global, esto resuena como algo más que la suma de influencias dispares. En primer lugar, hay que notar que esto no se trata simplemente de tirar riffs enroscados y gruñidos varios sobre un colchón constante de blast-beats, el trabajo rítmico se despliega con una soltura y un sentido del swing más afín al Jazz que al Grind, tomando de este último la agresión constante pero manejándola con una creatividad y un dominio instrumental que hará las delicias de cualquier nerd musical que se precie de tal. Y, ya que hablamos de control sobre los instrumentos, hay que decir que el constante y laberíntico flujo de notas que escupen la guitarra y el bajo (y algún que otro ocasional teclado de sabor claramente vintage) son, sencillamente, una de las experiencias más estimulantes y desconcertantes (en el buen sentido) que escuché en los últimos tiempos. Hasta el sonido, natural y orgánico, con el bajo bien mugriento pero aún así entendible, la guitarra un tanto más controlada, la batería tremendamente clara y las voces enterradas en la mezcla, resulta bastante original para lo que se suele escuchar en el Grindcore en general. Pero lo más importante de todo es que todo eso se suma para lograr un producto final de una intensidad que hace temblar los huesos al tiempo que sacude violentamente las neuronas. Amantes del extremismo, el virtuosismo más freak y las cosas enroscadas en general, no lo pueden dejar pasar.
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