Review de recitales: Cannibal Corpse

Cannibal Corpse
Fecha: 20/02/2010
Lugar: The End

Por Federico Acosta.

Aquí estoy una vez más para contarles los pormenores de lo que fue una noche intensísima. Buenos Aires y Florida en EEUU tienen algunas cosas en común. El clima de Florida en verano es opresivamente caliente y húmedo. Nuestras noches de verano dan cuenta de que nuestro clima es igual de cruel. La humedad en Florida es altísima como la de Buenos Aires, haciendo que cueste hasta respirar. Humedad alta, lluvias y calor insoportable castigan ambos lugares. Es por eso que los miembros de Cannibal Corpse se habrán sentido como en casa. Esa noche ni siquiera habrán extrañado a los asquerosos pantanos conocidos como Everglades. El suelo de The End estaba lleno de una sustancia pegajosa, un barro tóxico, resbaloso y letal sobre el cual caían los metaleros uno arriba de otro.
Apenas al entrar hay un pequeño disturbio, se nota que alguien intentó tomar la puerta o algo similar. El asalto terminó frustrado pero este tipo de cosas se están haciendo desagradablemente comunes, como recuerdo que sucedió en la fecha de Exodus y Kreator. Adentro resuena la música de los soportes, la cual no vale la pena mencionar. Generalmente en este tipo de fechas abundan los clásicos clones de Cannibal Corpse y  Morbid Angel. Ni siquiera los covers pueden resucitar un poco al público por ser extremadamente predecibles, pero el sonido al menos era fuerte y eso era un punto a favor. El lugar estaba repleto de gente y la temperatura empezaba a oprimir el pecho. The End es un lugar donde entra mucha gente pero no existe ni un solo ventilador o entrada de aire. Viendo que iba a ser una noche dura decido mojarme un poco la cabeza y me sorprendí al percatarme que había una persona limitando el consumo de agua per cápita. Tome mi ración de agua y decido tomar ubicación en la zona de guerra. El lugar tiene un piso arriba donde se ubicaron frágiles y delicadas señoritas y tranquilos espectadores. Uno de estos espectadores tenía enormes necesidades de orinar y como no lo dejaban bajar al baño porque habia demasiada gente queriendo subir, decidió orinar en una columna. La lluvia dorada bajo por la columna salpicando y manchando esas hermosas remeras de metal. Empezó una ola de escupitajos y puteadas de abajo hacia arriba. Varios de los que estaban ahí se encontraban muy exaltados, golpeando al público y golpeandose entre sí en la espera por la banda. Tanto fue así, que en medio del mosh pit más feroz se agarraron a piñas. Había realmente mucha gente sacada tanto arriba como abajo y el clima era muy espeso.
Entonces las luces se apagaron y llegó el cadáver caníbal. Si alguno de uds. había visto un show anterior de la banda son todos similares. Actualmente son una especie de AC/DC del metal extremo, no tienen efectos especiales ni nada fantástico, son 4 hombres tocando las canciones que les gustan sobre los temas que les gustan. Con eso les alcanza para hacer arder a un The End repleto. George "Corpsegrinder" Fisher empezó a escupir su poesía retorcida con "Scalding Hail" del último disco, "Evisceration Plague" y a continuación "Unleashing The Bloodthirsty. El sonido estaba algo bajo y eso le quitó intensidad a la banda. ¡Vamos! Son Cannibal Corpse, si por lo menos no suenan bien que me estallen los oídos del volumen. Luego de estas canciones siguieron "Murder Worship" y "Sentenced To Burn". El aire era irrespirable y hasta los más duros en el pogo descansaban un momento para poder arremeter con más fuerzas. La gente gritaba por Fisher, el público local no ahorró palabras de cariño para el cantante. También en un momento lo escupieron, pero Fisher sonrió y miró al que lo había escupido como diciendo: "Dale hermano, dejate de joder", mientras el público abucheaba al agresor. No pude ver si lo fajaban, así que no puedo darles más datos sobre ese incidente. Una de las cosas más peculiares era que había varias mujeres tirando golpes en el medio del mosh pit. Eran como harpías en el medio de las sombras atacando por atrás. Luego empezaron los primeros clásicos de la noche, esos que valen la pena como "I Cum Blood". De esta canción puedo decir que tuve un episodio similar así que me siento identificado. Luego llegó la dedicatoria de Fisher para todas las mujeres presentes en la sala: "Fucked With A Knife", que es otro de los clásicos clichés de la banda. El suelo estaba cada vez más pantanoso, las piñas y codazos volaban por todos lados y cada tanto sacaban a algún desmayado. El show bajó la intensidad con "Evidence In The Furnace" y "The Wretched Spawn", realmente era necesario un respiro. Fisher presentaba las canciones pidiéndole silencio al enardecido público argentino, que jamás le hacía caso. Les decía "Slow Down" o ponía el índice en la boca como si fuera un enfermero, para poder hablar. Pero todo el mundo estaba sacado como en un partido de fútbol o algo similar. Es notoria la calma de George para hablarle al público, contrastada con sus gritos y alaridos inhumanos en canciones como "I Will Kill You". El otro que resalta de la banda es Alex Webster y su famoso número del helicoptero humano. Llega un momento en que todos revolean las melenas a la vez, una postal más de la noche. El resto de las canciones fue un repaso de la carrera de Cannibal Corpse, quizás no de su etapa más gloriosa y probablemente el punto más flojo del show. Me sucedió que el entusiasmo y la adrenalina que genera la banda se diluye, y a muchos les sucede lo mismo. Otros se mantienen enardecidos por el ciego fanatismo especialmente los que no los vieron nunca. En esta seguidilla de temas pasaron “Perverse Suffering”, “Shatter Their Bones” y “Make Them Suffer”. Para “Pit of Zombies” Fisher preguntó al público si no estaban cansados, y la verdad que el calor era insoportable. Pero luego la banda empezó la levantada con "Vomit The Soul". Luego tocaron otro tema del nuevo disco, "Priests Of Sodom", al que le pegaron "Five Nails Through The Neck". La cabalgata final siguió con "Devoured By Vermin" y el clásico "Skull Full Of Maggots". El final fue para bailar al estilo de Jim Carrey. Por cierto para cerrar la noche de los clichés, Fisher como siempre dice "Keep Supporting Death Metal". Tras esa frase la destructiva "Hammer Smashed Face" y la sorpresita del final: "Stripped, Ripped And Strangled". Fisher intentó saludar a su gente, le dió la mano a algunas personas pero había uno de los que estaban sacados al principio del recital, que subió la valla y se colgó encima del tipo. La banda entonces decidió retirarse rápidamente y la seguridad paralizada no sabía que hacer, por lo tanto se subió otra persona más y todos discutían allí arriba. No debería haber terminado así pero fue lo que sucedió.


Lo bueno: Una noche de Death Metal con canciones que no fallan nunca.


Lo malo: Sonido mediocre, cero ventilación y el peligroso ataque del público zombie.